“Echa el freno y disfruta de la vida. Al ir demasiado deprisa no sólo te pierdes el paisaje, también pierdes el sentido de adónde vas y por qué”
-EDDIE CANTOR
A veces decidir realizar un viaje puede generarnos algo de estrés, por sentir la necesidad de tenerlo todo controlado, preparar la maleta, sitios que poder visitar, y sin darnos cuenta estamos con la mente constantemente en el futuro y generando expectativas de como será nuestra estancia, el tiempo que hará y la infinidad de actividades y lugares que podremos visitar. Todo esto solo hará que nos sintamos ansiosas y cada vez más alejadas del momento presente.
Esta guía es una invitación para que conectes con la verdadera intención de viajar: pudiendo ser esta una hermosa forma de conectar con tu creatividad, explorando e inspirándote a través de nuevas culturas, costumbres o paisajes… Y la actitud que sembremos durante este viaje también tendrá un impacto en nuestro cuerpo, energía y en el planeta. A continuación, exponemos las herramientas que nos ayudan a mantenernos conscientes y alineados con nuestra intención a la hora de viajar. Deseamos que puedan inspirarte a crear las tuyas propias en función de tus necesidades y valores.

1. CONECTAR CON LA INTENCIÓN Y ADAPTACIÓN CONSCIENTE
Antes de realizar cualquier viaje, y sabiendo que tendrá un impacto sobre nuestro cuerpo y medio ambiente, nos cuestionamos cuales son verdaderamente las intenciones, según ello podremos elegir el lugar al que nos vamos a desplazar sabiendo que nuestra estancia allí cubrirá esas necesidades. Al organizar las actividades diarias, siempre reservamos tiempo libre para descansar y dar opción a nuevos planes que puedan surgir sobre la marcha.
Para poder plasmar todas las ideas, sensaciones y la intención de nuestro viaje, no puede fallar un cuaderno de escritura. En el que ir soltando toda la información y conectar así de forma más intuitiva con esa intención. Por supuesto, siempre llevamos nuestro cuaderno durante nuestra estancia para ir anotando el proceso y las experiencias vividas.
Antes de viajar o cuando estamos visitando un lugar nuevo, es conveniente que adaptemos nuestra forma de hacer a las necesidades reales del lugar que vayamos a visitar, cuestionándonos cuál es la forma más responsable de interactuar con el entorno: consumo de alimentos, agua, aire acondicionado… Haciendo un uso consciente y responsable.


2. CUIDAR DE LA ENERGÍA Y RITMOS CIRCADIANOS
Al viajar nuestro cuerpo tiene que adaptarse a los nuevos cambios del lugar, el reloj interno de nuestro cuerpo tiene que irse ajustando al ritmo de la naturaleza y a su ritmo circadiano. Para apoyar y favorecer esta transición podemos ir adaptándonos una semana antes de partir, realizando ajustes a la nueva zona horaria, llevar una dieta ligera y saludable para no forzar y desgastar nuestra energía.
Si eres algo sensible a los lugares masificados y sientes que agotan tu energía, como por el ejemplo el uso de transporte público, museos, etc. te recomendamos que incluyas en tu día espacios para conectar con la naturaleza, evitar zonas expuestas a contaminación acústica, buscar jardines, parques, ríos o playas… y así recuperar de forma orgánica el equilibrio.
Ofrecerte un buen descanso es fundamental, por eso evitar la luz azul de los dispositivos móviles, pantallas… y reducir la luz 2 o 3 horas antes de acostarnos para favorecer un sueño profundo y regenerativo. En este punto no puede faltar El aceite esencial de lavanda orgánica, para calmar y apoyar un sueño profundo y reparador. Coloco una gota en la palma de mis manos cierro los ojos e inhalo lento y suave. También puedes echar una gota en la almohada o en el arco de los pies antes de acostarte.


3. RITUALES Y CONEXIÓN CON EL NUEVO LUGAR
Para mí los rituales son una excelente manera de anclarme al momento presente, le confieren belleza y sentido. Durante nuestros viajes podemos ser más flexibles con ellos, y adaptarlos a las nuevas circunstancias ayudándonos a estructurar y crear el ritmo de ese día, dejándonos sorprender y confiar en lo que la experiencia nos vaya regalando.
Una de las propuestas puede ser enraizarnos en el nuevo lugar, descalzándonos y tomando contacto con la tierra. Este gesto puede ayudarnos a centrarnos, bajar el ritmo cardiaco y liberando cualquier estrés o tensión acumulada de nuestro viaje.
Si deseas obtener más información sobre la importancia de los rituales en nuestro día, el impacto que tienen sobre nuestra generación de hábitos saludables, puedes acceder a nuestra sección de e-books en el programa Detox The body, mind & soul.

4. COMPRA LOCAL Y COMUNICACIÓN AMABLE
En ocasiones cuando llegamos a un nuevo lugar, conectamos con una posición de superioridad y de exigencia, a veces sin darnos cuenta (Hemos pagado por un viaje y necesitamos que se nos trate bien). Establecemos una actitud de necesidad y exigencia nuestras conversaciones con las personas con las que nos relacionamos pueden resultar algo tensas (camarero, casero, recepcionista, etc.),no empatizamos con ellos, ni nos hacemos conscientes de que pueden llevar otro ritmo o estilo de vida distinto al nuestro. ¿Qué tal si probamos a saludar de forma consciente, ofreciendo una sonrisa y antes de pedir, preguntar que tal están? Seguro que desde este lugar la energía que proyectamos es bien distinta, si te sirve de ayuda antes de iniciar una conversación puedes hacer una respiración que te conecte con ese momento y con tu cuerpo para desde ahí empezar a hablar.
Cada lugar es único y tiene su propia esencia. Cuando viajamos a una nueva tierra debemos desprendernos de algún modo de nuestras creencias, y hábitos, y relacionarnos con el lugar y sus gentes como si fuera la primera vez, con una mirada que contempla, acepta y que no emite juicios. Así te nutrirás de la experiencia conectando con sus costumbres y su sabiduría.
Una de las cosas más importantes para nosotros es la disponibilidad de alimentos orgánicos y saludables. Cuando nuestra alimentación no es la adecuada, experimentamos estrés y fatiga. Poder encontrar mercados y/o agricultores orgánicos se vuelve esencial para nuestro bienestar y para apoyar el comercio local.

5. LIMPIEZA DEL ESPACIO Y CUIDADO DEL CUERPO
Al llegar a un nuevo lugar es normal que nos podamos sentir extrañados y por supuesto ese lugar contemple energías. Para adaptarlo a nuestras necesidades podemos mover algún elemento de decoración o hacer algún cambio en la distribución de objetos, si considerásemos conveniente, de forma respetuosa y volviendo a dejarlo como estaba al irnos.
Crear un altar para conectar con nuestra intención y generar un espacio de bienestar, puede ser tan simple como colocar una vela, y algunos elementos, palo santo o incienso. E incluso si fuera posible, recojo cuidadosamente alguna planta local, concha o piedra para conectar con la energía y belleza de la naturaleza. Un lugar para agradecer y meditar todos los días.
Aunque estemos de vacaciones es importante cuidar de nuestro cuerpo, con prácticas diarias que le ayuden a adaptarse al nuevo entorno con facilidad y serenidad. Meditaciones, estiramientos para darnos los buenos días, etc.
Duchas conscientes para llevar la atención al cuerpo. Cuidar de mi cabello, con champú sólido, que facilita el transporte y cuida de mi y del medio ambiente de forma respetuosa, además al estar hecho con aceites esenciales favorece el estado de ánimo y bienestar. Por supuesto en mi rutina de higiene no puede faltar el limpiador y crema facial para mantener hidratada la piel.

Cuando viajamos también lo hace nuestro cuerpo, mente y alma, cuidar de forma consciente, encontrando el equilibrio y el bienestar, si deseas seguir indagando y aprender a cuidar y amarte de forma consciente te invitamos a sumergirte en nuestro programa Detox para encontrar recursos y herramientas que te devuelvan a tu centro, pudiendo desintoxicar el cuerpo, sanar el alma y equilibrar la mente.
Esperamos y deseamos que esta guía pueda servirte de inspiración para crear la tuya propia.
Os mandamos mucho amor.
Un abrazo,
Lugar: Casas do Campo – Lg Regueiro 1, 15315, Monfero, A Coruña
Texto y diseño: Maria Belber
Fotografía: Juan A. Blanco